sábado

y el adiós a tu ironica sonrisa de fiesta clandestina,
el adiós a tus lunares café amargo; el adiós al adiós,
porque sin vos no volveré a funcionar.
Más la ambivalencia del estado de sitio
que declaré entre nosotros,
que tiene más de teoría que de práctica
me tiene marchitando.Muriendo.
Seca, débil y sola.
Tal vez, sólo me equivoqué desde un principio,
evitando reconocerlo, evitando siquiera verlo.
Vendandome los ojos
y estableciendo mi propia dictadura del dolor-



carlìe

1 comentario:

sólo es tierra para tí.